COWORKING & EXPANSIÓN

Su rol dejó de ser la única razón que mueve el ambiente de colaboración, ahora es una alternativa al desarrollo de las ciudades.
La experiencia detonada por los hábitos creados en el trabajo flexible ha hecho que los espacios colaborativos sean una opción efectiva para abordar los retos de la expansión urbana, promoviendo un desarrollo urbano sostenible.

El estudio “Retos y perspectivas del trabajo” de de WeWork México y PageGroup, señala que 42% de los mexicanos se encuentra a una distancia de 10 a 50 kilómetros de su lugar de trabajo.

La tendencia, es que estas distancias se mantengan o, incluso, aumenten. Como consecuencia de esto, los tiempos de traslado serán mayores, el tráfico incrementaría y, por lo tanto, la calidad de vida de las personas podría deteriorarse.

Sin embargo, la expansión en la urbanización trae consigo múltiples retos, desde el aumento de emisiones de gases de carbono y la disminución en la calidad de vida.

Por ello, en ciudades en crecimiento, la presión sobre los recursos y la infraestructura aumenta día a día, impactando significativamente el medio ambiente, el desarrollo social y la economía.
“La flexibilidad y la sostenibilidad se han convertido en componentes esenciales para el éxito y la resiliencia de las ciudades, especialmente con la tendencia de expansión. Los espacios colaborativos y flexibles están emergiendo como soluciones innovadoras para enfrentar estos desafíos. Estos espacios no solo permiten a las empresas reducir costos operativos, sino que también fomentan una cultura de sostenibilidad y colaboración”, apuntó Karen Scarpetta, CEO de WeWork Hispanoamérica.

Informes de ONU-Hábitat indican que en México, la tendencia es que en el 2030, 83% de la población se concentre en ciudades.

Dicho aumento de zonas urbanas, traería como consecuencia el incremento en las distancias, tiempos y costos de los trayectos urbanos, además de que crecerán las externalidades negativas o costos sociales y se requerirá de mucha mayor inversión para lograr mayor conectividad espacial.

Además genera un impacto importante en la eliminación de áreas verdes, intensificando el efecto de isla de calor y contribuyendo al calentamiento global.
Asimismo, la falta de una adecuada planificación urbana ha llevado a la creación de asentamientos informales, exacerbando la exclusión social y afectando la calidad de vida de millones de personas.

El informe de la ONU-Hábitat también destaca la necesidad de desarrollar infraestructuras que favorezcan el transporte público y modos de transporte no motorizados, pues, datos de WeWork México revelan que 49 % de los mexicanos usa su vehículo para llegar a sus lugares de trabajo, contribuyendo a la congestión del tráfico y a la contaminación urbana. Los espacios colaborativos, estratégicamente ubicados cerca de nodos de transporte público, facilitan una movilidad más sostenible, disminuyendo la necesidad de largos desplazamientos en automóvil y promoviendo un estilo de vida más saludable y ecológico.

La integración de tecnologías verdes y la promoción de la eficiencia energética en estos espacios son cruciales para reducir las emisiones urbanas y mitigar el impacto del cambio climático. Los estudios indican que la adopción de prácticas sostenibles, como la reducción del consumo de energía y el uso de materiales eco-amigables, es esencial para enfrentar los retos ambientales actuales.

Estos espacios colaborativos ofrecen también una flexibilidad invaluable para las empresas, ya que permite ajustar rápidamente el tamaño y la estructura de las operaciones en respuesta a las necesidades cambiantes del mercado.

El estudio destaca que las empresas que adoptan modelos de trabajo flexibles experimentan una tasa de rotación de empleados un 25% más baja, lo que implica menos costos y más posibilidades de crecimiento.

Incluso la propia expansión urbana presenta desafíos significativos en términos de equidad social. La falta de acceso a espacios de trabajo adecuados puede limitar las oportunidades económicas para muchas personas.

Los espacios colaborativos ofrecen una solución inclusiva, ya que facilitan el acceso a infraestructuras de alta calidad y fomentan la creación de comunidades vibrantes y diversas.

Si bien, la expansión urbana en ciudades en crecimiento presenta numerosos desafíos, también abre la puerta a oportunidades para innovar y desarrollar soluciones sostenibles. Por tanto, los espacios colaborativos y flexibles se perfilan como una opción efectiva para abordar estos retos, promoviendo un desarrollo urbano que armoniza el crecimiento económico con la conservación ambiental y el bienestar social.
Ante este contexto, la colaboración entre gobierno, sector privado y sociedad civil es vital para diseñar ciudades resilientes que ofrezcan una alta calidad de vida a sus habitantes sin comprometer el medio ambiente.