DISEÑO RESPONDE A DESAFÍOS

En un mundo que va hacia la sustentabilidad, el reciclaje y la recuperación de usos definen el rumbo de la arquitectura.

Especialmente en tiempos en que el cambio climático ha impuesto retos importantes para hacer resilientes las edificaciones.
Día con día ocurren situaciones, como los incendios forestales de enero pasado en Los Ángeles, que orillaron a las autoridades de la ciudad de Santa Mónica, la Palisades Charter High School y CW Driver a transformar una antigua tienda departamental Sears en una escuela secundaria temporal para 2,500 estudiantes cuatro semanas.

La devastación generalizada por los incendios forestales en Eaton y Palisades, que diezmaron los barrios de Pacific Palisades y Altadena, causaron pérdidas por más de 131 mil millones de dólares y la destrucción de más de 16,000 viviendas y edificios a causa de los incendios que  destruyeron el 40% de la escuela preparatoria Palisades Charter High School (Pali High).

Ante los múltiples impactos del aprendizaje remoto y la necesidad de que los estudiantes regresaran al campus antes del final del año escolar, Pali High sumó a Gensler, C.W. Driver Companies y la ciudad de Santa Mónica para transformar 100,000 pies cuadrados de espacio sin edificar dentro de una histórica tienda departamental en el centro de Santa Mónica.

Kelly Farrell, directora general de la oficina de Gensler en Los Ángeles considera que la habilitación de un espacio temporal era clave dado que los estudiantes se enfrentarían por segunda ocasión al aislamiento del aprendizaje remoto en cinco años.

“El proyecto representaba más que construir una escuela; tenía el potencial de crear un lugar donde los estudiantes pudieran reconectar y reconstruir su comunidad”, dice Farrell.

Adicionalmente este proyecto exigía un tipo diferente de innovación, basada en la urgencia, la creatividad y el impacto en la comunidad.
El proyecto replanteó los métodos de impartición hasta las prioridades de diseño, para crear una escuela completamente funcional en tan solo 30 días.

Además, el edificio se había reubicado durante el COVID-19 como oficina creativa, con dos plantas nuevas, un atrio luminoso y con buena estructura. “Sin embargo, el edificio era un cascarón frío: no tenía plomería ni iluminación, y solo se habían instalado sistemas básicos de climatización y seguridad contra incendios”.

Otro caso que evidencia el efecto de la ola de transformación de espacios es la readecuación que la misma firma hizo en un espacio de trabajo sobre una estación de tren en Londres, proyecto que tuvo que evaluar las barreras que frenan la conversión de oficinas a viviendas.

Fue un planteamiento arquitectónico donde el centro fueron la vivienda asequible y revitalizar las ciudades, a través de la superación del statu quo y acciones que reducen la tasa de desocupación de oficinas y revitalizar nuestras ciudades.
En este proceso la firma desarrolló una colaboración conBrookings Metro, HR&A Advisors y Eckholm Studios para estudiar la conversión de oficinas para el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de Estados Unidos en seis ciudades.

Steven Paynter, Global Building Transformación & Adaptative Reuse Leader, considera que las ciudades han pasado por las cinco etapas del duelo y, recientemente, puede que finalmente hayan aceptado que la crisis de la vivienda no va a desaparecer y que se necesitan medidas deliberadas para recuperarse.

Fue este contexto el que generó la oportunidad del proyecto de conversión de oficinas para el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de Estados Unidos en Houston, Los Ángeles, Pittsburgh, St. Louis, Stamford y Winston-Salem.
A través de atender el diseño, políticas, finanzas y economía, se logró establecer una ruta integral para que los responsables políticos y los promotores inmobiliarios gestionaran el complejo proceso en Estados Unidos.

Si bien mucho ha cambiado desde que el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano, los fundamentos del mercado inmobiliario siguen siendo los mismos y no han experimentado cambios positivos desde 1971.
Abordar el desafío, requirió la combinación de análisis de mercado, entrevistas con las partes interesadas y evaluaciones de viabilidad arquitectónica, que proporcionan datos reales sobre qué edificios se pueden convertir en cada una de las seis ciudades y qué políticas impulsar para incentivar las conversiones en cada mercado.

El resultado fue que atender las brechas de costos, los complejos procesos de aprobación y la escasez de subsidios para viviendas asequibles era la clave en las conversiones.
Paynter dice que esta situación hizo que Los Ángeles esté paralizada por la zonificación, los permisos y una serie de desafíos relacionados con la normativa estatal.

Para una ciudad que enfrenta una grave escasez de viviendas y, en particular, una necesidad crítica de vivienda asequible, superar estas barreras ahora, en lugar de dentro de tres años, es fundamental.

Además, de los desafíos particulares que llevan a observar cómo mientras Los Ángeles y Stamford luchan por proporcionar suficientes viviendas para satisfacer la demanda regional de nuevas unidades, ciudades como Pittsburgh y Houston luchan por mantener los beneficios fiscales y de otro tipo asociados con edificios y distritos de oficinas obsoletos y de bajo rendimiento.