EL COMPLEJO CAMINO DE LA VIVIENDA

La reducción en los niveles de ventas en el mercado de la vivienda no es nuevo. Ya desde 2019 se había ralentizado el desplazamiento de unidades en distintas regiones de México. En particular, la Ciudad de México (CDMX) fue uno de los mercados más afectados por la paralización que experimentaron los permisos para nuevas edificaciones.

Sin embargo, el Covid-19 redujo la expectativa de ventas de vivienda para los siguientes 12 meses y planteó una serie de retos con los que deberá adaptarse, en particular la incertidumbre.

La vivienda genera, de acuerdo con información compartida por la consultora Tinsa, 2 millones de empleos y genera el equivalente a más de 6.5% de Producto Interno Bruto (PIB).

En perspectiva, la firma indica que en los últimos 10 años la vivienda nueva ha experimentado distintos momentos, pero ha establecido procesos de recuperación.

Es el caso específico de 2009 cuando se unieron los efectos de la crisis subprime y la influencia del H1N1. Sin embargo, la recuperación fue paulatina del mercado en stock y ventas. Para el período de 2013 a 2018, se registró el mayor boom de ventas con un total de 81 mil 159 unidades.

No así los primeros 5 meses de 2019 cuando la revisión de permisos arrojó la paralización de 500 proyectos y una reducción de 35% en las ventas.

Actualmente pese al efecto negativo de las fases de confinamiento que empezaron en marzo pasado, reflejado en la peor caída de del PIB en la última década, las ventas de vivienda sólo disminuyeron 13.4% en relación con lo experimentado en el último trimestre de 2019.