STAYCATION

El regreso en la hotelería va mucho más allá de recuperar los niveles de ocupación a partir de la confianza de los viajeros para desplazarse en largos trayectos aéreos a los destinos más buscados en el mundo.

Esta evolución que podemos ver en nichos del real estate como las oficinas, la vivienda, los centros logísticos y el retail, tiene un peso importante en la transformación que enfrenta el mercado inmobiliario turístico de la cual hemos comentado en las últimas semanas.

Pero este cambio no es del momento actual generado por el COVID-19. En los últimos años, el negocio de la hospitalidad había venido incorporando elementos diferenciadores basados en la sustentabilidad y la creación de experiencias de los viajeros. Algo que quienes lideran en esta industria definen como los pilares de la nueva sustentabilidad en la hospitalidad.

Basta ver la lista de hoteles más esperados en 2021 en el mundo y la mayor parte de los cuales crea una conexión entre los espacios, las experiencias y la integración de las comunidades donde se establecen. Es una trilogía que siguen los operadores de los espacios y admiran los viajeros.

De manera adicional, el distanciamiento social creó la integración de las actividades vinculadas con el Staycation, un término en inglés que surge de unir el concepto stay (quedarse, estar) y vacation (vacaciones).

Dicha inercia aceleró desde el verano de 2020 una tendencia que se vincula con los segmentos del resort y la vivienda, que detonaron el consumo de artículos para exteriores en los inmuebles, al igual que el turismo carretero.
Su impacto coyuntural no paró en la conducta y afluencia de consumidores de estas salidas sin maletas.

Una reflexión que la firma Ares Arquitectos hizo sobre la estrategia arquitectónica que se analiza en el mercado de la vivienda vertical se enfoca en otros aspectos como el rediseño de espacios, generar experiencias, reconversiones enfocadas a la sustentabilidad, el wellness individual y colectivo.

Lo anterior implica un cambio en la forma en que la vivienda vista como un commodity, ahora se ha convertido en un producto de conveniencia, para finalmente ser prospectado como un espacio habitable multifuncional para el bienestar.
Esta visión sugiere cambios profundos donde los modelos de co-living y co-working, estructuras de vivienda modular con espacios interactivos e inteligentes donde las amenidades tienen prioridad, para dar paso a menos áreas privadas y más públicas.

En esta tendencia, la construcción es sustentable y el delivery lo habitual. De ese tamaño es la transformación que viven las distintas áreas del negocio del real estate.

Artículo publicado en El Financiero|Bloomberg