USOS MIXTOS ABREN OPORTUNIDADES

Fueron la salida en el último ciclo inmobiliario cuando capitalizaron el alto costo de la tierra, pero que ahora crean opciones para despertar el interés de usuarios luego del distanciamiento social.
Son las oportunidades que los usos mixtos están creando en distintos centros urbanos de ciudades en el mundo para transformar proyectos, muchos de ellos ubicados en zonas céntricas que requieren ser dinamizadas.

Este análisis parte de la vida que podrían crear en los núcleos urbanos, al abrir oportunidades de generar experiencias múltiples para inquilinos, adoptar las tendencias que transforman los espacios y la hospitalidad urbana.
Esta última práctica post pandemia ha traspasado la industria hotelera y ahora es retomada en ambientes corporativos y comerciales.

Pero algunas firmas globales que visualizan el cambio van más allá. Los usos mixtos son el camino para edificar comunidades resilientes de rápido acceso, con proyectos que tengan como prioridad el bienestar y estilo de vida equilibrado de sus usuarios.
Por tanto, las personas de nuevo se colocan al centro del entorno, al tiempo que los espacios maximizan su productividad y fomentan las experiencias comunitarias.

Los también denominados distritos ahora regresan a la escena con proyectos de oficinas, residenciales, comerciales y hotelería con la variable de que ahora tienen el reto de atraer y retener visitantes y residentes de sus espacios.
Son distritos con un mayor grado de integración, como el que en una reciente reflexión Dean Strombom de Gensler en Houston destaca para ejemplificar esa transformación.
Se trata de la renovación que experimentaron los edificios de oficinas obsoletos en Houston Center, a partir de la intervención de la firma que busca renovar el desarrollo de usos mixtos, de Brookfield Properties.

La propuesta consideró el rediseño de la parte alta del grupo de edificios mediante puentes aéreos de espacios mixtos donde se integraron áreas abiertas y dado que se ubica cerca de Discovery Green, un parque urbano, incorporó restaurantes abiertos a pie de calle, tiendas y área de entretenimiento.

Es una transformación que de alguna manera ya habían incorporado distintos desarrolladores en México, pero que en el regreso se vuelve coyuntural sea integral bajo los nuevos parámetros.
Uno de ellos es el crecimiento exponencial de la vida de barrio ante las disposiciones sanitarias que orilló a restaurantes a contar con áreas abiertas.
Son cambios que oxigenaron distintos giros y espacios en proyectos inmobiliarios, a los que ahora se suman estas tendencias.

Y no sólo eso, en la mente de inversionistas y desarrolladores  está la flexibilidad de los usos, como un camino que haga factible adaptarse a las cambiantes inercias de los mercados.

Artículo publicado en El Financiero|Bloomberg.