19S: REHABILITACIÓN, RETROFIT Y MÁS

Dos años pasaron del 19 de septiembre de 2017. Historias polarizadas se generaron por los sismos y desde entonces, las discusiones se han diluido.

El fondo del asunto es la lección aprendida, lo alcanzado en materia de nueva regulación constructiva y los compromisos de autoridades, desarrolladores y sociedad.

No existe al momento, un análisis integral  en la opinión pública, ha ganado el efecto de la nueva política restrictiva para nuevas edificaciones. Es un proceso obligado para intentar ubicar los abusos y reconocer lo positivo que se ha edificado en los últimos años.

Con todo, es un hecho que la rehabilitación no para en las zonas afectadas, sino en lo que debería suceder para identificar y reestructurar lo que quedó tocado estructuralmente por los sismos, pero que no recibió ningún tipo de atención.

En distintas zonas de la Ciudad de México (CDMX) lo que falta es un retrofit, como el que ha permitido a ciudades como San Francisco en Estados Unidos, vivir un proceso de más de una década ir restableciendo la estructura de múltiples edificios dado que se trata de una zona sísmica. Es incluso un camino que aún no termina.

La CDMX es una zona sísmica y requiere de acciones contundentes, no sólo dejar en el análisis superficial acciones inconclusas, como el hecho de que existen edificios dañados que han sido demolidos y una regeneración real que acompañe los nuevos corredores inmobiliarios que ha anunciado el gobierno.

Mientras eso sucede, un factor que pocos observan es lo que ha ocurrido con el mercado, en particular el de la icónica colonia Condesa que ha vivido en las últimas dos décadas, la mayor expansión y consolidación de precios de propiedades que se haya visto.

Lo distinto en estos dos años es además de las demoliciones, el incremento con menor ritmo que experimentan sus precios. La plataforma Lamudi dice que el precio de los departamentos han subido en el último año 4.87%.

Es un mercado en el que con la mayor atención de autoridades, no ha logrado generar procesos eficientes de tratamiento de predios que permitan la rehabilitación de inmuebles, además de algunos casos en los que con todo y demolición, por falta de régimen de propiedad en condominio hay afectado a propietarios que perdieron por completo sus inmuebles.

En la alcaldía de Cuauhtémoc se tienen registradas 121 unidades familiares en etapa de reconstrucción, de las cuales 15 se han demolido, 49 están en obra o por iniciar, una terminada y 56 en proceso administrativo.

La plataforma también señala que de 250 unidades multifamiliares en etapa de rehabilitación, ninguna se ha demolido, 51 están por iniciar o en obra, 2 terminadas y 197 en procedimiento administrativo.

Con los datos anteriores es un hecho que el reto de la reconstrucción tiene resultados limitados, a pesar de la evolución mismo del mercado que pese a todo apenas ralentizó el aumento de precios.

Una última reflexión obligatoria es la cultura de la población no sólo de pedir el uso de materiales resistentes, diseños estructurales avalados, sino participar en una verdadera acción ordenada de protección civil que haga factible generar la ayuda en momentos clave, en especial los posteriores a un sismo.

Todo en suma es parte de una breve parada por lo sucedido en 24 meses posteriores al sismo. En espera que el aprendizaje sea suficiente para fomentar cultura y desarrollo inmobiliarios sólidos y adecuados a los nuevos tiempos.