BRANDED RESIDENCES

Desarrolladores hoteleros nacionales e internacionales suman a su estrategia de inversión las residencias de lujo.

Es una de las tendencias que han hecho posible no sólo la estabilización del mercado inmobiliario turístico, sino que da equilibrio a quienes desarrollan proyectos con marcas insignia orientadas al mercado de lujo.

Este movimiento se observa en Cancún, Los Cabos Riviera Nayarit y otros destinos como San Miguel de Allende y Ciudad de México. Playas o ciudades, son ganadores de la recuperación de la pandemia y que han logrado estabilizar su operación e integrar marcas enfocadas a este segmento de mercado.
Las branded residences también han permitido que no sólo cadenas de prestigio consoliden asociaciones con desarrolladores inmobiliarios para integrar proyectos de alta gama con propiedades del segmento de lujo que de la mano de nombres y marcas reconocida globalmente.

Para cadenas y desarrolladores, la inclusión del componente residencial en los proyectos permite la reducción en el nivel de apalancamiento de la inversión y abre otra área de negocio en la administración de los activos.
Del lado de los inversionistas, la adquisición de residencias del tipo maximizan el activo porque son administrados en los períodos no utilizados por los propietarios.
Así, cada vez es más frecuente encontrar la mezcla de hoteles con residencias. En el mercado destacan las propuestas de St. Regis, Four Seasons y Ritz Carlton han logrado consolidar alianzas con desarrolladores e inversionistas locales como Artha Capital y Thor Urbana, entre otros, con propuestas que nutren el mercado.

Otro caso que valida este camino es el que sigue Grupo Posadas, que integró el concepto a sus proyectos Bloom Tulum, Live Aqua Residences en Acapulco y Los Cabos, al igual que en Curamoria Celeste Huatulco.
El plan de la cadena, que en la vicepresidencia de operaciones lidera Enrique Calderón, es consolidar las cartas de intención que actualmente tiene para integrar dos adicionales que sumarían 80 residencias a su portafolio.

La tendencia también es resultado de aspectos como la ocupación hotelera en los destinos ganadores donde el viajero extranjero tiene un peso importante. Al inicio de 2023, se registró la apertura de 39 hoteles de 3 a 5 estrellas, con los cuales se incorporaron más de 9 mil 100 unidades el año pasado, de los cuales más de la mitad se ubican en Cancún, Riviera Maya y Playa del Carmen, de acuerdo con un análisis de la firma CBRE México.
Ante esta previsión, la recuperación se nutre de las tarifas hoteleras y la inclusión de nuevos hábitos de los viajeros, como el segmento de negocios  donde la práctica de los viajes combinados ha cambiado la estancia promedio de los viajeros.
Son aspectos que sin duda revolucionan la razón de ser de los activos inmobiliarios turísticos, que permanecen luego del segmento industrial entre los de mayor atractivo para inversionistas nacionales e internacionales.
Analistas consideran también que parte de los resultados alcanzados por este tipo de destinos, obedecen no sólo a cómo ha respondido el mercado, sino también al soporte aéreo y la conectividad que sigue haciendo factible el arribo de viajeros aéreos internacionales.

Columna publicada en El Financiero|Bloomberg.
Fotografía: Branded Residences, Tasvalúo.