HEALTHCARE DESIGN

El diseño y edificación de espacios de salud enfrentan retos ante los efectos de la pandemia.
En el estado actual de la economía global, el efecto evidente que han creado los obstáculos en la cadena de suministro y las presiones inflacionarias, planificar un proyecto de construcción especializado como los espacios de salud son un desafío.

Una encuesta reciente de Cushman & Wakefield entre contratistas generales (GC) en Estados Unidos, basaron sus predicciones en los últimos seis meses de operaciones.
En este lapso,  98 % indicó un aumento en los costos de los proveedores y los plazos de entrega de los materiales, y el 75 % indicó mayores plazos de ejecución de proyectos.

Si bien se prevé que los costos de los proveedores esperados y los plazos de ejecución del proyecto continúen aumentando, los encuestados se mostraron un poco más optimistas sobre la trayectoria de los plazos de entrega de los materiales.

Y es que las limitaciones de la cadena de suministro han repercutido en todas las industrias y sectores. Además de este nicho, los proyectos residenciales y comerciales experimentan mayores costos, atrasos en los materiales y escasez de mano de obra.

Se prevé que sólo en materia de los retrasos materiales, la construcción sanitaria, particularmente vulnerable a la acumulación de materiales, seguirá experimentando retrasos en suministros como equipo médico, redes y sistemas de baja tensión, equipo HVAC (unidades de aire acondicionado, controladores de aire, equipo especializado), al igual que lo vinculado al eléctrico es decir, artefactos de iluminación, interruptores eléctricos (ATS, UPS, generadores).
Otros incluidos en dicha tendencia son las puertas, marcos y herrajes: puertas de madera maciza, herrajes electrificados y ascensores.

Pero el impacto no sólo es en ese sentido. La pandemia ha tenido varios efectos duraderos en los proyectos de construcción de atención médica y el enfoque para gestionarlos.

Por ejemplo, los plazos de los proyectos se han visto afectados y siguen siéndolo, ya que la industria experimenta y gestiona los retrasos en la cadena de suministro y la escasez de la mano de obra.

Ante esta situación, los equipos de gestión de proyectos han reinventado su enfoque de planificación para garantizar que la planificación tenga en cuenta los retrasos causados por los desafíos laborales materiales.

El uso de una planificación sólida con objetivos estratégicos claramente definidos, hace posible que los cambios cuenten con una medida más segura del perfil de riesgo real y una mejor predicción del costo de un proyecto, así como el tiempo estimado de entrega.

Por ello, el análisis, planeación, un plan de ejecución estratégica que considere  adquisiciones y riesgos inflacionarios, el bloqueo y aseguramiento de materiales con los proveedores resultan estratégicos.

Este entorno hace indispensable conocer los principales riesgos por adelantado y acompañamiento con planes de mitigación.